Los problemas de concentración no son nada nuevo, pero… Durante esta última temporada parecen haberse disparado. De acuerdo a Teamstage (2022), la fuerza laboral reporta insatisfacción por juntas improductivas, con más de 31 horas perdidas al mes en estas reuniones que no rinden frutos. Hay múltiples razones por las cuales esto se ha exacerbado en los últimos años: Covid y el home-office, la falta de objetivos claros, distracciones continuas por temas irrelevantes y más. Esta pandemia también ha generado que ciertos jefes se vuelvan micro-controladores, agendando reuniones más de lo normal. Estamos de acuerdo contigo en que a veces hay demasiadas juntas en el día y no a veces tienden a hacer poco sentido.

Las interrupciones constantes se han convertido en algo de todos los días; especialmente para aquellos que viven con más gente, tienen hijos, perros o una casa que no tiene nada que ver con la oficina. Por si fuera poco, las distracciones disminuyen la motivación y al mismo tiempo nos hacen más propensos a equivocarnos. Cal Newport, por ende, propone aprender a trabajar de una forma distinta, y aprender a concentrarnos. Siendo uno de los principales autores en la materia, él le comunica al mundo las diferencias principales entre trabajar de forma concentrada y prolongada en su libro Deep Work. Este profesor de la universidad de Georgetown hace mucho énfasis en la diferencia entre hacer tareas que son ligeramente demandantes y aquellas en donde nuestro cerebro necesita más concentración. Es primordialmente a través de periodos de enfoque total que llegamos a nuestros mejores resultados.

Pero… ¿Cuáles son los síntomas principales que reporta la gente como falta de concentración?

Healthline (2022) nos dice que hay varios síntomas que reporta la gente que no se puede concentrar, así como no poderte acordar de cosas que pasaron hace poco tiempo, no poderte mantener sentado o quieto, equivocarte más de lo normal y el principal, que te cueste mucho trabajo llevar a cabo tareas más difíciles y demandantes. Nos referimos a aquellas que no tienes que hacer cotidianamente pero que también son necesarias: investigaciones, cálculos y proyecciones en Excel, presentaciones exhaustivas en Powerpoint y poner atención a pláticas que demanden altos niveles de concentración. ¿No te ha pasado que a veces la plática se pone complicada y te pones a pensar en lo que vas a hacer de cenar?

Y si esos son los síntomas, ¿cuáles pueden ser las causas?

Hay múltiples causas por las cuales la gente se distrae. Desde el amigo de la oficina que siempre te quiere enseñar fotos hasta el perro del vecino que no para de ladrar. En esta sección no nos enfocamos tanto en esas, sino las que dependen de ti. ¡Estas son aquellas en las que sí puedes tener algún tipo de control y en las que te recomendamos enfocarte! En WebMD se hace una amplia cobertura sobre estas causas que también propician tu distracción:

1. Déficit de atención. Conocido por sus siglas en inglés ADD o ADHD, esta condición no sólo le pertenece a los niños, y se puede tratar con medicinas. En nuestra opinión humilde, hay mucha gente que dice tener ADD aunque en realidad lo que le falta desarrollar su concentración. Recordemos que concentrarse en temas poco divertidos es una habilidad que se puede desarrollar con el tiempo, así como la condición física o aprender un idioma.

2. Ansiedad. Mundialmente reconocida como un causante de distracciones. Difícilmente puedes estar en paz con tu trabajo y con tus tareas cuando hay otras cosas en la parte de atrás de tu cabeza. Hay múltiples formas de lidiar con la ansiedad, así como la terapia, meditación, yoga e incluso escribir tus pensamientos.

3. Depresión. La depresión se caracteriza por un periodo prolongado de tristeza o falta de motivación. Este estado de ánimo hace que todo lo complicado sea más difícil ya que no tienes ganas de muchas cosas. Se puede trabajar de diferentes maneras, pero normalmente requiere de ayuda profesional y a veces de medicamentos. Sabemos que no somos los primeros en decirte esto, pero el ejercicio es una excelente manera de empezar.

4. Medicamentos. Aunque suene contradictorio, hay muchas medicinas que pueden jugar con nuestros niveles de concentración. Las medicinas para el sueño son unas de las principales con efectos de aletargamiento que pueden durar hasta el día siguiente, sobre todo en las mañanas cuando las tareas altamente demandantes son primordiales. Las pastillas para las alergias también pueden representar un papel importante, al tener como efecto secundario efectos de somnolencia. Pon atención al tipo de comprimidos que estás tomando y dentro de ellos puedes encontrar a algún culpable potencial. 

5. Mala Alimentación. El término de “mal del puerco” es muy conocido en México y con justa razón. Las comidas pesadas requieren de una amplia irrigación sanguínea al estómago, necesaria para poder procesar los alimentos. Todo lo que se cocina con aceites a alta temperatura genera problemas en la inflamación corporal, causando alzas en la presión. Al comer mal también es probable que privemos a nuestro cuerpo de todas esas vitaminas y minerales necesarias -aquí te explicamos como es que el cerebro usa los nootrópicos para tener un mejor desempeño.

6. Malos hábitos. Hay veces en las que los culpables somos nosotros. Prestarnos al multitasking de forma continua o inclinarnos hacia la postergación son dos ejemplos principales de estas conductas. Busca hacer que tu tiempo rinda de forma eficiente dedicándole el tiempo, sin distracciones, a lo que tienes que hacer en el momento.

Piensa en esto…

Cuándo fue la última vez que cerraste tu correo, tu Whatsapp y tus redes sociales para dedicarle toda tu energía mental a alguna tarea? Al romper con esta línea de pensamiento, estamos afectándonos a nosotros mismos y a nuestro trabajo. Newport nos dice que si lográramos tener un periodo sin interrupciones durante una o dos veces al día seríamos capaces de terminar nuestras tareas en menos de la mitad del tiempo. ¿Qué opinas? Sabiamente él también reconoce que lograr esto requiere el desarrollo de una habilidad y que no es fácil, especialmente en el Siglo XXI. En la parte de atrás de nuestra cabeza siempre existe la urgencia de contestar cualquier mensaje, correo o hasta Instagram. En realidad Cal decreta que este sentido de urgencia es una costumbre; difícilmente te van a despedir y probablemente no tendrás repercusiones serias por estar cuarenta minutos sin celular ni redes sociales.

 No es de extrañarse que, según múltiples publicaciones hechas en el último año, las compañías hayan tenido problemas con la productividad. Simplemente en Estados Unidos, las organizaciones reportan haber perdido cerca de 720 horas durante el año pasado por persona. Para los emprendedores, este tema representa un problema importante. Es fácil distraerte haciendo las tareas más sencillas impulsado por la preocupación de que el no hacerlas podría afectarte.

Inténtalo…

La siguiente vez que tengas que hacer muchas cosas, piensa en dos métodos de trabajo, ambos sugeridos por Cal Newport: bloqueo de tiempo dedicado a una tarea o un retiro de algunos días en algún lugar libre de distracciones. Si te estás imaginando una cabaña en el bosque para trabajar y piensas que eso es lo que recomiendan, estás en lo correcto. Se trata de asegurarte que vayas a estar completamente libre de cualquier cosa que pueda llamar tu atención y privarte de trabajar. Otra de las finalidades de este método también es que te sientas recargad(o) energéticamente, y le permitas a tu cabeza liberar ese potencial creativo. Si no puedes o no prefieres irte a una cabaña o a algún lugar retirado, hay un método más sencillo de aplicar que también funciona de maravilla. Utiliza algún tipo de temporizador y dedícale esa sesión a algo importante que tengas que hacer. La idea es que durante este tiempo no te permitas ningún tipo de distracción. Eso quiere decir que NO puedes revisar tu correo, no WhatsApp y definitivamente no Instagram. Es normal que los primeros días te sientas extraño, especialmente como si tuvieras que contestar todo de manera urgente; no te preocupes, ese sentimiento se pasará cuando te acostumbres.

¿Qué otro tipo de cosas puedo hacer para concentrarme mejor?

1. Ejercicio (con enfoque a alta intensidad). Sabemos que no es ninguna sorpresa hablar sobre las bondades del ejercicio y recomendarte que lo implementes en tu vida, especialmente en el ámbito cerebral y cognitivo. Si te despiertas temprano y activas la liberación de dopamina, es mucho más probable que tu día fluya de forma distinta. Si quieres tener un efecto en donde te sientes invencible ante el mundo, intenta el ejercicio de alta intensidad. ¿Ejercicio de alta intensidad? Es aquel en donde tu capacidad cardiaca está siendo llevada al límite, al punto de no poder hablar más de dos palabras al hilo.

2. Alimentación. Hazte amigo de las verduras verdes, el ajo, la spirulina e incluso las moras azules, ya que jugarán a tu beneficio en presión sanguínea, inflamación y en la parte cognitiva.

3. Sonidos Binaurales. A través del cambio de frecuencias auditivas, estos sonidos se han estudiado para ayudarle a la gente a tener mayores niveles de concentración. Son fáciles de encontrar, desde videos en YouTube hasta Spotify. Para tener un mejor efecto es primordial que utilices audífonos. Si realmente te convencen y quieres utilizar un servicio más profesional o con mayor disponibilidad de opciones, baja Endel o Focus@Will. Lo único que tienes que hacer en estas aplicaciones es escoger tu canal, ponerte el tiempo necesario y listo.

4. Meditación. Aunque sea la meditación guiada de algún video y cinco minutos de tu día, esta práctica llegó para quedarse por una razón: te permite estar un poco mejor concentrado en las cosas importantes. Si nunca lo has hecho, te recomendamos empezar con una App, hay muchas gratis.

5. Nootrópicos. Si no leíste ya nuestro artículo sobre los nootrópicos, te recomendamos hacerlo. Estas substancias naturales tienen amplio potencial en la suplementación y en la productividad mental. Es por esto que nuestra proteína vegana y keto cuenta con algunos de los más importantes en una dosis amigable.

En conclusión:

Hay mucho que decir al respecto de la concentración, y estamos conscientes de que es un problema grande en nuestra sociedad. Sin concentración es más difícil llegar a la plenitud laboral, a la motivación profesional y definitivamente a esa parte creativa que nos hace sentirnos como que estamos dando nuestro mil por ciento. ¡Prueba nuestra proteína nootrópica y empieza a sentir una diferencia en tu vida cotidiana!